Red de Caminos
Naturales
Etapa: Barcial del Barco - Maire de Castroponce
Descripción
Entre los Valles del Esla y el Órbigo
Discurriendo sobre la plataforma del antiguo ferrocarril Plasencia-Astorga, entre zonas de cultivo (maíz, girasol, viñedos…) este tramo del Camino Natural Vía de la Plata supone la transición entre las vegas del río Esla y las de uno de sus afluentes, el Órbigo y el paso de la comarca de Tierra de Campos a la de Benavente y los Valles, ambas en la provincia de Zamora. El nombre de este camino natural no puede hacer más justicia al trazado ya que se cruza en varias ocasiones con la Ruta Vía de la Plata.
Este tramo de casi 25 kilómetros parte de la estación de Barcial del Barco, a las afueras de esta población zamorana. A pesar de encontrarse en desuso, los edificios con los que contaba aún se mantienen en pie, y cuenta con un área de descanso. Antes de echar a andar, asombra la imponente presencia de un silo del FEGA (Fondo Español de Garantía Agraria) de grandes dimensiones. Estos graneros modernos, muy comunes en la España rural, se solían situar junto a las vías de comunicación, como las carreteras o vías férreas.
Dejando atrás el silo, el camino no tarda en cruzarse por primera vez con la Ruta Vía de la Plata, un itinerario turístico-cultural marcado con señales de la Junta de Castilla y León, y con mojones de granito con una vieira amarilla, pues se trata también de una ruta jacobea. Poco después se pasa bajo la carretera N-610 alcanzándose un meandro del río Esla al cabo de un kilómetro. Durante la primer parte del trayecto hasta Benavente, se irán pasando por una serie de pasarelas y puentes que permiten que el camino pase sobre caminos rurales y barrancos o arroyos. El primero de todos es de un puente metálico de algo más de 50 metros sobre un barranco que desemboca en el Esla.
El río y el camino se separan durante un kilómetro y medio, durante un trayecto en que la antigua plataforma del ferrocarril se eleva sobre un terraplén, entre los cultivos de la llanura de inundación del río Esla. Poco antes de encontrarse de nuevo, el camino se interna en una chopera de producción (la fabricación de tablero de madera de este árbol es una de las industrias más relevantes de la comarca) y posteriormente en un bosque de galería con sauces, fresnos y espinos. El río Esla se salva mediante un impresionante viaducto de más de 250 m de acero y sillería de granito, construido en 1932 y reformado en 1949.
Al otro lado del río, se repite el paisaje de cultivos y pasarelas sobre arroyos y caminos pasando junto a un desvío que permite llegar a Villanueva de Azoague, famosa, entre otras cosas, por la azucarera, una de las industrias más emblemáticas de la comarca, y que aprovechaba la línea de ferrocarril para la entrada y salida de productos. Los dos grandes silos de la azucarera son bien visibles en todo este tramo del camino hasta llegar a las inmediaciones de Benavente.
Tras dejar a un lado la azucarera y el desvío que permitía a los ferrocarriles acceder a sus instalaciones (las vías aún están presentes), es posible observar, también a la derecha del camino, el monasterio cisterciense de El Salvador. Aunque el edificio actual es moderno (1976), la congregación se remonta al siglo XII, cuando se fundó en la localidad de Santa Colomba (a unos 4 km).
Tras cruzar un nuevo puente, se accede a Benavente por el sur, tras pasar bajo el viaducto de la N-525. Hasta llegar a la estación de Benavente, el camino discurre entre el promontorio sobre el que se asienta el casco antiguo de la localidad a la derecha, bajo la vigilancia de la Torre del Caracol (en su día formó parte del castillo de la Mota y actualmente es parte del Parador de Turismo de Benavente) y el caño de los Molinos, un brazo del río Órbigo que, entre otras cosas, daba energía a un molino harinero en las proximidades de la estación.
Al otro lado del caño se encuentra el Prado de las Pavas, un espacio verde que antiguamente formaba parte del famoso Jardín de los condes de Benavente y en la actualidad se ha reacondicionado para crear un singular jardín botánico y zona de esparcimiento para los lugareños. En este enclave se haya también el Centro de Interpretación de los Ríos del programa INTEREG, encaminado a crear una serie de infraestructuras medioambientales a ambos lados de la frontera luso-española.
Tras pasar junto al molino harinero mencionado antes, se llega por fin a la estación de Benavente. Muy bien conservada, el edificio de viajeros se ha restaurado como albergue de peregrinos y el entorno de la estación se ha convertido en un auténtico museo sobre el ferrocarril, poniendo en valor las grúas, depósitos de agua, toperas, palancas de cambio de aguja y hasta una locomotora, distribuidas por una gran área de descanso ajardinada. Tras cruzar la carretera ZA-P-15, el camino continúa entre una zona de choperas y huertas en compañía del caño de los Molinos. Las últimas casas de Benavente quedan ocultas tras el terraplén a la derecha del camino, que se interna, tras pasar sobre la carretera por un puente, en un amplio monte mediterráneo dominado por la encina, la dehesa de Mosteruelo. El contraste entre este paisaje y el de las zonas de vegas por el que se venía caminando se puede constatar en los lugares en que el encinar permite ver, a la izquierda del camino, los cultivos y choperas junto al caño de los Molinos. Antes de llegar al paso bajo la autovía A-52, el camino natural se habrá vuelto a cruzar con la Ruta Vía de la Plata hasta en dos ocasiones, alejándose definitivamente los dos itinerarios.
De vuelta al paisaje de cultivos (sobre todo maizales y algún viñedo), con la presencia ocasional de zonas arboladas y zarzas cuya sombra será de agradecer en épocas calurosas, se cruza el arroyo de Reguero, y llama la atención a la derecha, casi en el horizonte, la presencia del convento de Nuestra Señora del Valle, junto a la localidad de San Román del Valle. Aunque en ruinas (se están realizando labores de conservación), merece la pena acercarse a visitarlo.
Desde los últimos kilómetros se ve en el horizonte la fábrica de piensos de Pobladura del Valle, a las afueras de la población y a escasos metros de su estación. La estación de Pobladura se mantiene en muy buen estado, habiéndose rehabilitado el edificio de viajeros como alojamiento rural. Se pueden ver otros vestigios de su antiguo uso ferroviario, como las palancas de cambio de aguja, un desvío con un tramo de vías aun presente, o la estructura para girar los vagones junto al área de descanso habilitada entre los dos edificios principales.
Tras pasar bajo la carretera de Pobladura a Morales del Rey y dejar a la derecha el desvío para llegar a la localidad de Pobladura, tan sólo quedan 4 km para llegar, de nuevo en el paisaje de cultivos y los últimos kilómetros en compañía de la autovía A-6 a mano derecha, al límite provincial entre Zamora y León, que marca el final de este tramo del Camino Natural Vía de la Plata.
Desde aquí se puede llegar hasta Maire de Castroponce por caminos rurales, o siguiendo la carretera LE-114 y desviándose al sur junto al histórico puente de la Vizana, un puente de origen romano volado durante la guerra de la independencia y reconstruido a principios del siglo XX.
Enlaces de interés
Puntos de interés
Cultura
- Iglesia de Santa María la Mayor
- Bodegas excavadas
- Convento de Nuestra Señora del Valle (ruinas)
- Monasterio cisterciense El Salvador
- Camino de Santiago. Ruta Vía de la Plata
- Camino de Santiago. Ruta Vía de la Plata
- Puente de la Vizana
Hidrografía
Informacion
Infraestructura
- Estación de Pobladura del Valle
- Azucarera
- Apeadero de Villabrázaro
- Estación de Barcial del Barco
- Puente sobre el río Esla
- Estación de Benavente
Municipio
- Villanueva de Azoague
- Benavente
- San Román del Valle
- Torre del Valle
- Pobladura del Valle
- Villabrázaro
- Barcial del Barco
Parador
Vegetación
Perfil
Destacados
Benavente
Benavente
En privilegiado lugar sobre el que se asienta la actual ciudad Benavente, un promontorio sobre la llanura de los valles de los ríos Tera, Órbigo y Esla, se han asentado a lo largo de la historia diferentes pueblos por su estratégica posición como cruce de caminos. Fue la Brigaecium de los astures brigecienses, Ventosa para los suevos y Malgrat durante el siglo XII antes de que Fernando II le diera su nombre actual.
Ha sido testigo esta ciudad de importantes hechos históricos: allí se fraguó el proceso de unión de los reinos de León y Castilla bajo reinado de Fernando III en la conocida como Concordia de Benavente (1230); sufrió los estragos de la guerra de la Independencia, en 1808 tuvo lugar una importante batalla entre tropas inglesas y francesas que afectó a muchos de sus edificios, tras el saqueo de la ciudad, y el propio Napoleón se instaló en Benavente durante varios días.
Entre su rico patrimonio arquitectónico, hay que destacar la iglesia de Santa María de Azogue y la de San Juan de Mercado (ambas en estilo románico y comenzadas en el s XII, aunque no se terminaran hasta tiempo después), la Torre del Caracol, único resto del castillo-palacio de los Pimentel (condes de Benavente) y actualmente parte de las instalaciones del Parador de Turismo, el Hospital de la Piedad, fundado por el quinto conde de Benavente para acoger a los peregrinos o el edificio del Ayuntamiento (s.XIX) de estilo neoclásico. Sus fiestas patronales, fiesta de la Veguilla, se celebran el “Lunes de Pascuilla” (ocho días después del Domingo de Resurrección) en honor de la Virgen de la Vega. También se celebran diferentes ferias como de Caza y Pesca, Cerámica, de la Tapa, del Pimiento…
Por su situación, en uno de los principales nudos de comunicaciones del noroeste peninsular, En la actualidad la ciudad de Benavente, capital de la comarca zamorana de Benavente y los Valles, se ha convertido, por su situación, en un centro de logística de gran importancia en el transporte terrestre.
Ferrocarril Plasencia-Astorga
La línea Plasencia-Astorga, conocida también como Palazuelo-Astorga formaba parte del trazado del ferrocarril del Oeste de España, una línea transversal de Sevilla a Gijón.
El ferrocarril se inauguró en 1896, estando en funcionamiento hasta finales del XX. En 1985 cesó el servicio de viajeros, y en 1996 terminó el tráfico de mercancías. Aunque aún hay tramos por los que circulan trenes de otras línas, el Programa de Caminos Naturales del MAPA ha rehabilitado partes del trazado para su uso recreativo.