Puntos de Interés
Hydrography
Canal del Acequión
Cuando en 1802 Albacete recibió la visita del rey Carlos IV pocos se imaginaban que sería el artífice de una de las mayores construcciones hidráulicas de la zona. Tras comprobar el estado de las aguas estancadas en los alrededores de la ciudad y ver cómo afectaba a sus habitantes, decretó la construcción de un canal con el que se pretendía llevar todas esas aguas hasta el río Júcar.
Durante el proyecto se construyeron una serie de ramales a fin de desecar las aguas estancadas en el área de Los Llanos y solucionar los problemas de salubridad. Uno de ellos es el Canal de la Estacadilla. Todos esos ramales confluyen en el paraje de La Reunión, punto donde comienza el Canal de María Cristina.
El itinerario que va desde el canal de María Cristina hasta el de la Estacadilla se ha convertido hoy en parte del recorrido de una ruta medioambiental que parte desde el núcleo urbano de Albacete y en la que es posible conocer una importante variedad de flora y fauna.
En el caso de este canal su recorrido se extiende hasta la laguna homónima –que hoy se encuentra desecada–, un enclave en el que ha sido hallado un importante yacimiento arqueológico de la Edad de Bronce, algunas de cuyas piezas se exhiben hoy en el Museo Arqueológico Nacional y en el Museo Arqueológico de Albacete.