Puntos de Interés
Cultura
Almacén de Ribera (Carcaixent)
Situado junto a la estación de tren de Carcaixent se levanta el imponente almacén de José Ribera. Se trata de una edificación de carácter industrial desarrollada al abrigo del despegue del ferrocarril valenciano. Este proyecto estuvo liderado por José Ríos Chinesta, un maestro de obra que mantenía muy buenas relaciones con la burguesía local, entre la que destacó la familia Ribera, para la que construyó este almacén y rehabilitó una casa solariega, entre otras cosas.
El almacén de Ribera surgió por la necesidad de manipular las naranjas para su posterior exportación dentro de cajas. Las obras tuvieron lugar durante 1903 y 1910 y está considerada como una de las instalaciones de referencia de la arquitectura ecléctica-modernista de nuestro país. Durante su época de mayor esplendor era conocido en toda la comarca como la catedral de la naranja.
El edificio, que aún se conserva en perfectas condiciones, ocupa el extremo de una manzana teniendo fachadas en tres calles distintas. La principal, conocida como fachada de los testeros, sigue un esquema muy utilizado entre los empresarios de la naranja. En ella predomina el ladrillo visto y destaca un gran arco en torno al que se estructura toda la composición. Abundan los huecos en este muro, cuyo objetivo era dotar al almacén de gran iluminación interior.
En el interior encontramos un gran espacio diáfano que era el utilizado propiamente como almacén y para los trabajos relacionados con la materia prima, además de distintas estancias que acogían las oficinas y una vivienda familiar. La nave central es mucho más amplia y alta que las dos laterales en las que hay un altillo que recorre todo el almacén.
Destaca de esta gran obra, los diferentes materiales utilizados y sus diversas texturas y colores, además de las columnas interiores de fundición, de clara inspiración clásica, adornadas con rosetas y utilizadas para marcar la separación de las naves. Sobre ellas descansan una serie de arcos escarzanos que soportan toda la estructura de la cubierta.
Debido a la gran cantidad de ventanas en las fachadas exteriores, el interior siempre está inundado de luz, lo hace que el almacén parezca aún más amplio.
Al ayuntamiento adquirió y rehabilitó el edificio en 1989 y actualmente, gracias al espacio y amplitud interior, es utilizado para todo tipo de actos multitudinarios.