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Cultura
Crucero
Este tradicional símbolo religioso de la cultura gallega se encuentra en la entrada al municipio de Lobios. Presenta una escalinata sobre la que se sitúa el pedestal que sirve de soporte al crucero. La columna, con varias bandas de corte vertical talladas a lo largo de la misma, alberga en su parte superior un capitel de diseño jónico sobre el que se alza la cruz.
Estas infraestructuras de piedra son un vestigio de la importancia que el misticismo ha tenido siempre en Galicia. De hecho, se estima que en toda la región existen entre 10.000 y 15.000 cruceros. Se trata de unas sobrias construcciones que suelen encontrarse en los recónditos cruces de caminos (conocidos como “encrucijadas”) que atraviesan el imponente entorno natural gallego. Asimismo, tampoco es extraño encontrarlas en los atrios de pequeñas iglesias, en las inmediaciones de ermitas o custodiando los cementerios con el propósito de proteger de lo sobrenatural.
Aunque los cruceros más conocidos son los que se encuentran en las encrucijadas, a lo largo de los siglos se han construido este tipo de infraestructuras religiosas con otros propósitos diferentes. Por ejemplo, para establecer una parada en los itinerarios de peregrinación, para ofrendas religiosas, para la protección de los vecinos o, simplemente, para establecer el límite de un determinado terreno.