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Municipio
Gandía
Los orígenes de capital de la comarca de La Safor se remontan al Paleolítico. Así lo atestiguan los restos encontrados en diversas cuevas situadas en el municipio de Gandía, como la Cueva del Parpalló, la de las Maravillas o las cuevas del Barranco del Llop. Igual de importante son los vestigios romanos que atesora la ciudad, donde se han encontrado monedas, vasijas y lápidas de época imperial en las cuevas de Penjadas y de los Cerdos.
Aunque el origen reciente de la actual Gandía es sin duda de época musulmana, encontramos la primera mención documentada de la ciudad en un documento cristiano de 1249 el Libre del Repartiment de Valencia del rey Jaime I de Aragón. Durante la época medieval, pasó a ser ciudad feudal siendo propiedad de la casa de Borja, pasando a señorial en 1494 cuando Fernando el Católico la vendió al Cardenal Rodrigo de Borja, futuro Alejandro VI.
Tras una época convulsa con el levantamiento de las Germanías en la que fue ocupada por los agermanados que obligaron a los moriscos a convertirse al cristianismo, la familia Borja logró recuperar su dominio, siendo Francisco de Borja el encargado de realizar unas importantes obras de amurallamiento y creando el recinto de la conocida como Vila-nova que quedaba protegida con la muralla de los ataques de piratas turcos y corsarios al servicio del rey de Francia. Importante fue también la construcción de un colegio para el que se conseguiría una bula pontificia con el que pasó a tener categoría de Universidad, actualmente las Escuelas Pías.
Tras esa época de auge sufrió una grave crisis a raíz de la expulsión de los moriscos en 1609, debido a que eran ellos los que se ocupaban de los ingenios azucareros. Más de un siglo y medio duró una crisis económica y demográfica. Testigo inmutable de la historia de la ciudad son los grandes monumentos que aún continúan en pie. Comenzando por un casco urbano medieval de visita obligada, donde uno puede perder la noción del tiempo paseando por las callejas de la judería y la morería y terminando por las murallas de la ciudad, declaradas Bien de Interés Cultural.
Monumento de importancia es el Palacio Ducal. Allí es donde vio la luz por primera vez Francisco de Borja y posee un distintos elementos de inigualable belleza como la Galería Dorada, del siglo XVII y sus maravillosos azulejos o el Patio de Armas, de estilo gótico. Las Escuelas Pías, antaño Universidad, resulta un edificio interesante de visitar al igual que la Alquería del Duc, una antigua fortaleza en la que destacan los torreones y troneras.
Además en Gandía encontramos algunas construcciones de tipo religioso como la iglesia de Santa María, construida a principios del siglo XV y, por tanto, de estilo gótico, aunque mezclado con otros de diversas épocas. El Monasterio de San Jerónimo de Cotalba, también gótico, fue centro espiritual y cultural de la comarca de La Safor durante siglos y la ermita de Santa Ana, situada en la montaña del mismo nombre y construida en el siglo XV permite divisar una espectacular panorámica de la ciudad y el mar.
Las fiestas de Gandía son variadas y se distribuyen a lo largo de todo el año. Así el 17 de enero se celebra San Antonio Abad, en el mes de marzo tienen lugar las populares Fallas y en el mes de junio entre el 23 y el 24 se festeja San Juan Bautista con las conocidas hogueras. Ya a mediados de julio están las fiestas marineras en honor de la Virgen del Carmen y el 25 y 26 del mismo mes se baja la imagen de Santa Anna desde la Ermita hasta la Parroquia en procesión. Por último, destacar el homenaje que cada año se celebra en honor del patrón municipal, San Francisco de Borja.
Mención aparte merece la gastronomía del municipio con su popular fideúa a la cabeza.