Puntos de Interés
Infraestructura
estación de Hervás
La antigua estación de tren de Hervás, construida a finales del siglo XIX, era una de las infraestructuras que integraban el conocido como Ferrocarril de la “Vía de la Plata” que unía Plasencia y Astorga. Esta línea ferroviaria también recibió el nombre de Palazuelo-Astorga y supuso uno de los principales motores económicos de la zona. Principalmente se usaba para el transporte de pasajeros y mercancías, sobre todo muebles, toneles de vino, castañas, y frutas.
En 1890 comenzó la construcción del primer tramo de esta línea, que tenía 55,7 kilómetros. En aquella época Hervás era uno de los municipios más importantes de la zona, debido a su importante desarrollo industrial y por eso reclamó que el tren pasase por la villa. La empresa encargada de las obras aceptó esta propuesta, a pesar de que el trazado tuvo que desviarse de su ruta natural para pasar por este punto. En 1893 se abrió al tráfico la estación de tren de Hervás, ubicada entre las de Aldeanueva y Baños.
El 31 de diciembre de 1984, tras más de 90 años en servicio, pasó el último tren por esta estación. Ese día, un grupo de manifestantes que protestaban contra el cierre de la línea bloquearon el paso de los últimos trenes. Hoy, lo que antaño fue el edificio de pasajeros alberga el Centro de Interpretación del Ferrocarril, incluido dentro de la red de Museos de Identidad de Extremadura.
El resto de edificios que se conservan se han rehabilitado, respetando su esencia histórica, para distintos usos. El antiguo muelle de carga es hoy un albergue para los peregrinos de la Vía de la Plata, con cinco dormitorios y capacidad para 22 plazas. Los huéspedes pueden contemplar las enromes puertas corredizas de hierro por el que entraban y salían las mercancías, y, en las paredes, todavía se conservan las vigas de madera originales. Los dos pequeños almacenes que había se han transformado en bungalow y lavandería para uso de los peregrinos y muy cerca de aquí algo que suele sorprender a los que allí se acercan: una vagoneta balancín, conocida entre los ferroviarios como “zorrilla”.