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Infraestructura
Azud de Xerta

Entre los municipios de Xerta y Tivenys, en el curso bajo del Ebro, se encuentra la presa de Xerta, un monumento de ingeniería hidráulica con 310 m de largo, cuya distribución diagonal le proporciona un aspecto singular, ya que la mayoría de los azudes son perpendiculares a los márgenes del rio.
Los trabajos para aprovechar el agua del río en esta zona se remontan a la época musulmana. Fue en el siglo XIX cuando se realizaron las obras de acondicionamiento del azud que permitieron conducir el agua hacia los canales que hoy en día sirven para regar las huertas del Valle y el Delta.
Este azud se convirtió en un importante centro económico gracias a la abundante pesca que llevó consigo y también debido a que hizo posible mover los molinos harineros que se ubicaron en las orillas de Xerta y Tivenys.
En la actualidad, se conserva encima de la presa, en el margen derecho del río, uno de estos molinos harineros que data del año 1575 y que es una de las pocas construcciones industriales de estilo renacentista que se conservan en Cataluña. A inicios del siglo XX se instaló una fábrica de electricidad en el mismo y fue modernizada en 1918.
Otro de los beneficios aportados por este azud es que facilitó la navegabilidad del río y que, a día de hoy, permite a las embarcaciones superar en poco tiempo una elevación de hasta tres metros.
El azud de Xerta fue declarado Bien Cultural de Interés Nacional en la categoría de Monumento Histórico por la Generalitat de Cataluña en el año 2002, pero posteriormente anulado por sentencia del Tribunal Supremo de 2005. Actualmente está protegido como Bien Cultural de Interés Local.