Puntos de Interés
Municipio
Pozalmuro
Pozalmuro es un municipio cargado de historia. La población se asienta sobre Los Santos, perteneciente a la Segunda Edad de Hierro y cuyos restos arqueológicos han sido descubiertos en el centro del pueblo. También existen vestigios de la época Eneolítico-Bronce y de un castro datado en la I Edad del Hierro. A esto se une que el término municipal está atravesado por la Vía romana XXVII, en cuyas proximidades se hallaron dos miliarios que señalan una distancia de 7 millas a Augustóbriga (Muro) con las siguientes inscripciones:
“Tiberio César, hijo del Divino Augusto, nieto del Divino Julio, Augusto, pontífice máximo, investido de la potestad tribunicia por trigésimo quinta vez, del imperio por octava, cónsul por quinta, desde Augustóbriga VII millas”. De los años 33-34 d. C. como elemento constructivo de la casa de D. Pedro Calabia.
“El Emperador César Nerva Trajano, Germánico, Dacico, Pontífice Máximo, habiendo recibido la Tribunicia Potestad, Padre de la Patria, Emperador, siendo Cónsul por quinta vez. Desde Augustóbriga VII millas”. Datado entre los años 103 y 112 d. C.
Precisamente, cerca de este elemento señalizador encontramos la Fuente Vieja, también romana, construcción hidráulica realizada en sillares de arenisca encargada de abastecer al lavadero y una pila exenta expuesta en una zona ajardinada colindante. De la misma época es puente romano cercano, declarado Bien de Interés Cultural en 2001.
Aunque sin duda, una de las joyas arquitectónicas de Pozalmuro es la Iglesia de Santa María la Mayor. Construida en el siglo XVI pertenece al estilo románico. Posteriormente, en el siglo XVII fue reformada, por lo que existen algunos elementos de estilo gótico. Dentro del templo se guardan dos piezas excepcionales del arte lítico perteneciente al mobiliario litúrgico del románico. Por un lado, un sitial rectangular de piedra arenisca, del siglo XII, realizado en un solo bloque de piedra y labrado a hacha, con dos arcos de medio punto en relieve decorando el lateral izquierdo y con dos máscaras muy toscas en la parte frontal de los reposabrazos. Por otro, una pila bautismal de sillería decorada en la parte superior con un friso de arcos de medio punto sobre pilastras y bajo ellos otros de mayores dimensiones entrecruzados. En su interior observamos el altar mayor, de 1585, obra del escultor Pedro del Cerro y un retablo de estilo barroco.
Junto a la iglesia existen restos de una antigua fortaleza y una estela medieval en la portada del cementerio.
Señalar que los amantes de la poesía podrán acercarse hasta el “Huerto de Bécquer”, una sencilla vivienda rodeada por un huerto donde el poeta y escritor romántico Gustavo Adolfo Bécquer pasó largas temporadas.
Las festividades celebradas en esta población son tres principalmente: el 15 de mayo se honra a San Isidro Labrador y se bendicen los campos, el 31 de mayo se celebra la festividad de La Virgen del Amor Hermoso, durante la que se subastan rosquillos para el mantenimiento de la iglesia y, finalmente, entre el 15 y el 18 de agosto tienen lugar las festividades patronales de la Asunción de la Virgen y San Roque. Hay bailes populares, cena de hermandad y los vecinos comparten limonada en los terrizos.