
Puntos de Interés
Vegetación
Pinar

El pinar mixto mediterráneo es una formación arbórea semicaducifolia, endémica de la cuenca endorreica del mar Mediterráneo.
Una formación típica de las zonas de clima mediterráneo, caracterizadas por las altas temperaturas y por la falta de precipitaciones. Razón por la cual suelen encontrarse especies xerófilas, adaptadas a los extensos periodos de sequía, y pirófilas, resistentes a los incendios.
Este tipo de bosque suele encontrarse en relieves planos, mesetas o llanuras, y excepcionalmente en serranías y valles, como es el caso de la Serranía de Cuenca
La especie predominante en esta zona es el pino carrasco (Pinus halepensis), una planta arbórea de tamaño mediano que puede alcanzar los 20 m de altura. Esta especie de pino tiene unas acículas finas y flexibles, aguzadas, pero no punzantes, que son las más blandas y delgadas entre las hojas de los pinos que se encuentran en la península. Su corteza es de un color blanquecino, ceniza o plateado, aunque a medida que los ejemplares envejecen se observa como el tono, sobre todo de la base del tronco, va oscureciendo. Y, en cuanto a su fruto, son unas piñas de pequeño tamaño (6-12 cm) en comparación con otros árboles de la familia pinaceae.
Además, pueden verse ejemplares de pino piñonero (Pinus pinea), pino salgareño (Pinus nigra), pino silvestre (Pinus silvestris) o pino resinero (Pinus pinaster). Así como otras especies como: encina (Quercus ilex), alcornoque (Quercus suber), melojar (Quercus pyrenaica), sabina albar (Juniperus thurifera), sabina negral (Juniperus phoenicea), quejigo (Quercus faginea), enebro (Juniperus communis subsp. hemisphaerica), madroño (Arbutus unedo), coscoja (Quercus coccifera) o lentisco (Pistacia lentiscus).
A estas especies arbóreas les acompaña el matorral típico mediterráneo compuesto por un sotobosque espinoso y aromático con plantas como jaras (Cistus), retamas (Retama), tomillos (Thymus), romeros (Rosmarinus), lavandas (Lavandula) y cardos (Onopordum).
En cuanto a la fauna, en este tipo de bosques se pueden divisar ejemplares de ciervo (Cervus elephas), corzo (Capreolus capreolus), zorro (Vulpes vulpes), jabalí (Sus scrofa) o cabra montesa (Capra pyrenaica). Así como ratones de campo (Apodemus sylvaticus), conejos (Oryctolagus cuniculus) o liebres (Lepus europaeus).
Además, pueden encontrarse anfibios y reptiles como la salamandra común (Salamandra salamandra) y el sapo común (Bufo bufo). Y aves rapaces como el águila real (Aquila chrysaetos) el águila imperial oriental (Aquila heliaca), el quebrantahuesos (Gypaetus barbatus), la lechuza común (Tyto alba), el cárabo común (Strix aluco) o el milano real (Milvus milvus). Álamo negro (Populus nigra), sauce (Salix) y, más alejado del cauce, encina (Quercus ilex).
Entre los animales que sobrevuelan las lagunas podemos divisar ejemplares de aguilucho lagunero (Circus aeruginosus) o milano negro (Milvus migrans). Además de insectos e invertebrados como libélulas (Anisoptera), hormigueras de lunares (Maculinea arion) y caballitos del diablo (Zygoptera). Cerca del agua, encontramos tejones (Meles meles), galápagos leprosos (Mauremys leprosa) y ranitas de San Antonio (Hyla arborea).
Como curiosidad, el componente salino y pobre en oxígeno de las aguas de las lagunas ha propiciado la aparición de una capa anaeróbica, en la cual viven microorganismos que aprovechan el azufre presente en las mismas. El hecho de que estas formaciones se desarrollen sobre yesos las hace especialmente singulares siendo, junto al complejo lagunar del río Moscas en Fuentes, ejemplos únicos a nivel nacional y casi únicos a nivel europeo.