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Cultura
Ermita rupestre de San Acisclo y Santa Vitoria
Valderredible atesora la mayor concentración de arquitectura rupestre de España, lo que ha ocasionado que en ocasiones se la conozca como “la Capadocia Ibérica”.
Una de estas construcciones es la ermita rupestre de San Acisclo y Santa Vitoria, en la localidad valluca de Arroyuelos, un templo prerrománico excavado aprovechando un afloramiento de roca arenisca. Es uno de los templos rupestres de mayor complejidad y uno de las más importantes de los conocidos en la Meseta Norte, tanto por su tamaño como por su excelente conservación. También es uno de las pocos, junto a la ermita de San Miguel de Presillas, en tener dos plantas.
Es de planta es irregular, aunque algo cuadrangular. Desde la puerta de acceso se llega, a través de un pasillo en forma de túnel, a la primera planta. Tiene un pilar cuadrado del que salen cuatro arcos que permiten el apoyo del techo. Posee un arco triunfal de herradura y el ábside tiene bóveda de horno, con planta de herradura. Todo este piso inferior tiene un banco corrido adosado.
Al piso superior se accede desde el testero, a través de una escalinata excavada entre la pared meridional de la nave principal y el exterior de la roca donde se sitúa la cavidad. El piso superior consta, en la actualidad, de unas tribunas abiertas al exterior en el muro sur de la iglesia y de una cámara, ahora colgada en el ángulo NO de la iglesia. Este piso se completaba con un suelo de madera del que tan sólo quedan las oquedades para ensartar las vigas. El piso superior contaba con una ventana que está cegada casi en su totalidad por un muro moderno.
En el exterior de la iglesia, junto a la entrada sur, existe una necrópolis de tumbas excavadas en la roca, antropomorfas y de bañera, y los restos de algún tipo de construcción aneja en madera.
Esta construcción fue declarada Bien de Interés Cultural en 2004. Para acceder a ella, hay que seguir una pista empedrada que parte del norte de Arroyuelos.