Red de Caminos
Naturales
Etapa 28: Medellín - Valdetorres
Descripción
El mundo agrícola cargado de historia de las Vegas medias del Guadiana
La etapa parte desde la histórica Medellín, desde donde se controlaba el paso de los caminos de la zona, gracias a su estratégica localización al resguardo de la colina y en la orilla de los ríos. El trazado, como antaño, pasa obligatoriamente por el puente sobre el Guadiana, y recorre los cultivos de regadío entre este río y su afluente, el río Guadámez.
La etapa se inicia en una zona de descanso perfectamente acondicionada de Medellín, en las inmediaciones del puente de los Austrias. El viajero tiene la oportunidad de acercarse a su famosa playa de Medellín para tomar un baño, una playa fluvial muy bien acondicionada, con duchas y césped, en la que disfrutar de una agradable y refrescante jornada. A lo largo de todo el año se puede practicar la pesca dentro del coto, encontrándose abundantes bogas (Leporinus maculatus), carpas (Cyprinus carpio), barbos (Luciobarbus guiraonis) y lucios (Esox lucius), además de otras especies como el cangrejo rojo (Procambarus clarkii).
En el recorrido de la etapa 28 confluyen dos espacios naturales catalogados como Lugar de Interés Comunitario, son las ZEC (Zona Especial de Conservación) “Río Guadiana Alto-Zújar” y “Río Guadámez”. Este último es un afluente del Guadiana por su margen izquierda. Nace en Tierra de Barros y atraviesa con dirección sureste-noroeste la comarca de La Serena. En sus riberas podemos apreciar un bosque galería termomediterráneo muy bien desarrollado e importantes extensiones de fresnos (Fraxinus sp.).
Dentro de las especies más representativas de su fauna destacan dos tipos de galápagos: galápago europeo (Emys orbicularis) y galápago leproso (Mauremys leprosa). Suelen encontrarse muy cerca de las orillas de los ríos y las charcas tomando el sol en las horas más cálidas del día. La nutria, el cangrejo rojo, el barbo, la comiza y la avifauna de los sotos (ruiseñores, mirlos, carboneros,…) componen el resto de la fauna del río.
Según nos alejamos de las orillas la dehesa empieza a ser el ecosistema predominante. Es en la confluencia del Guadiana y del Guadámez donde se encuentra la mayor parte de la superficie protegida. Sin embargo el área no está exenta de riesgos por la extracción de áridos en las graveras.
Los cultivos de regadío aparecen a ambos lados del camino en la terminación de la zona llamada “La Isla”. Es un trayecto de tierra que se va acercando ahora hacia al río Guadiana, hasta encontrarlo y discurrir paralelo al mismo, en una zona de pesca.
La etapa cruza la Quebrada de Manuel Domínguez, señalizado con la imposibilidad del paso en caso de subida del nivel del agua en época de fuertes lluvias. Comienza así a discurrir entre zonas de regadío de arroz y maíz, siempre a la orilla izquierda del Guadiana y prosigue entre este tipo de cultivo hasta encontrarse con el cruce de caminos, desde donde parte el trayecto común a las etapas 28 y 29 de entrada y salida de Valdetorres, respectivamente. Si el caminante lo prefiere, puede comenzar la siguiente etapa desde este punto en dirección hacia Valverde de Mérida, aunque el inicio oficial está situado en el municipio de Valdetorres.
Para aquellos que deseen terminar la etapa 28 y dirijan sus pasos hacia Valdetorres, el camino continúa discurriendo entre tierras de regadío por espacio de unos cuatro kilómetros hasta encontrarse en un cruce señalizado con la carretera comarcal BA-142. Sigue entonces por las inmediaciones de esta carretera unos 500 m, antes de continuar por un camino de tierra hasta el puente sobre el río Guadámez, perfectamente señalizado.
En esta zona se encuentra una zona de descanso acondicionada para el baño en la que poder reposar. El acceso al centro urbano se realiza a través del puente antes mencionado.
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Información adicional
Medellín histórico
En sus orígenes debió ser un gran centro de producción agrícola y metalífera desde el que se controlaba gran parte del territorio que hoy día se denomina las “Vegas Altas”. En una de sus necrópolis se halló un importante tesoro tartésico, con piezas de orfebrería de oro y plata y un ajuar de cerámica y marfil. Actualmente estos objetos se encuentran en el Museo Arqueológico Nacional, en Madrid.
Medellín debe su nombre al cónsul romano Quintus Caecilius Metellus que, fundaría este asentamiento hacia el año 79 a. C. En una ladera del cerro del castillo se encuentra el teatro de época romana, que aprovechó el desnivel del terreno para ubicar el graderío. La mayor parte de la sillería del teatro fue reutilizada en época posterior para la construcción de la fortaleza.
Quedan vestigios de lo que pudo ser un puente romano pero el que actualmente cruza el Guadiana se finalizó en 1630, como podemos leer en una gran placa de mármol en la que figura también el escudo de los Austrias.
El castillo de Medellín se alza sobre un escarpado monte. Ha sufrido grandes transformaciones debido a las sucesivas ocupaciones y usos.
La iglesia parroquial de San Martín tiene su origen en el siglo XIII, aunque sólo se conserva una pequeña parte de esta época. En su interior se encuentra la pila bautismal donde se supone que fue bautizado Hernán Cortés, conquistador de México y el hijo más ilustre de esta localidad, representado en una gran escultura en la plaza.
En las proximidades de la población y al pie del puente de los Austrias, se encuentra la famosa playa fluvial de Medellín, en la orilla izquierda del Guadiana. Dotada con todo tipo de servicios, es desde hace tiempo un lugar de referencia para los habitantes de las comarcas próximas.