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Cultura
Ermita de las Nieves
Sobre el risco más alto de Famara, al norte de la población de Los Valles, se sitúa el hogar de la conocida como “patrona de las lluvias”. Esta pequeña ermita está dedicada a la Virgen de las Nieves, proclamada patrona de Lanzarote en 1725.
Protegida por un muro blanco y rodeada de palmeras, en 1423 se construyó este templo, según cuentan las leyendas locales por la aparición de la virgen a un pastor. A partir de aquel momento los agricultores lanzaroteños acudirían a este punto en peregrinación para pedir a su virgen lluvias para el buen provenir de sus cultivos.
Desgraciadamente, en el siglo XVI los piratas, dirigidos por el corsario Calafat, quemaron la ermita durante la invasión de 1569. Habría que esperar más de 100 años para que fuera reconstruida en 1711.
El aspecto actual que presenta la ermita de las Nieves nada tiene que ver con el de aquellos tiempos ya que, en 1966, debido a su mal estado, el arquitecto lanzaroteño Enrique Spínola González se encargó de demoler lo que quedaba del viejo templo de origen mudéjar y construir uno nuevo con un toque isleño. Ahora destacan sus muros blancos como la nieve en contraste con roca volcánica que mantiene en su entrada el aljibe original.
En honor a la devoción por la Virgen de las Nieves se celebra todos los años una tradicional romería que tiene lugar el 5 de agosto, en la que los vecinos del lugar acuden en procesión desde el Casco Histórico de Teguise hasta la explanada de la ermita, situada a 650 metros sobre el nivel del mar, en el punto más alto de la isla.
