Vegetación

Pino carrasco

El pino carrasco (Pinus halepensis) es una especie que puede llegar a medir hasta 20 m de alto. Sus piñas son pequeñas, en comparación con la de otros tipos de pinos como el piñonero, así como también lo son sus piñones. Suele crecer en climas mediterráneos en los que abunda el sol y no hay exceso de lluvias o frío. Es por ello que esta especie suele preferir terrenos calizos cercanos a la costa. Esto hace que la zona natural en la que crece esta especie es la región mediterránea, de hecho, es especialmente abundante en la mitad oriental y en zonas de las islas Baleares. Prueba de ello es que las islas de Ibiza y Formentera deben su denominación como islas Pitiusas (“islas de pinos”) a la abundancia de esta especie en sus costas.

Con respecto a los principales usos del pino carrasco, se trata de una especie cuya madera no es demasiado valiosa debido a su abundante resina, no obstante, es utilizada para la elaboración de algunos embalajes o aglomerados e incluso para curtir piezas. El pino carrasco es perfecto para restaurar y frenar la erosión en terrenos secos que se encuentren en las proximidades de la costa.