Puntos de Interés
Orografía
Cala Morell
Cala Morell es un pequeño puerto natural de la costa norte de Ciudadela situada entre las puntas de Llevant y de sa Tortera, así como dentro de la ensenada Cul de sa Ferrada.
Este entrante de mar se caracteriza por tener forma de L, con acantilados de curiosas formaciones rocosas, que conforman un paisaje singular. Entre sus elementos destaca la roca de “l’elefant”, sus aguas tranquilas, una pendiente suave y un fondo de arena y algas.
En sus márgenes se puede apreciar que cada lado de la cala pertenece a una era geológica distinta. A la derecha, los terrenos más antiguos que se corresponden a los periodos primario y secundario, mientras que, a la izquierda, las rocas ya pertenecen al periodo terciario.
Cala Morell es un lugar emblemático para los habitantes de la zona ya que acoge uno de los yacimientos prehistóricos más espectaculares de Menorca, formado por un asentamiento costero y una necrópolis.
El poblado, situado en primera línea de mar, estuvo habitado durante la edad de bronce (1400-1000 a, C.), y está delimitado por una muralla y formado por trece unidades de habitación. La técnica constructiva no es ciclópea, como correspondería a las navetas de habitación de la época, sino que es a base de pequeñas piedras.
La necrópolis, por su parte, está formada por catorce cuevas excavadas en la roca, de la época naviforme (1700 a. C.) empleada hasta el siglo II d. C. Las cuevas más antiguas son pequeñas de planta circular y techo semiesférico y las más tardías son las más grandes y monumentales e imitan las casas circulares de época post-talayótica (650 – 123 a. C.) con espacios diferenciados por medio de pilastras, escalones y columnas, picadas en la roca. Algunas tienen pequeños patios delante de su portal. La cueva más espectacular de todas presenta motivos arquitectónicos clásicos en relieve en su fachada, de inspiración etrusca y púnica.
A su alrededor hay un extenso pinar con una urbanización con casas de los años 60 de estilo ibicenco.