
Puntos de Interés
Hidrografía
Ojos de Monreal
El paraje conocido como los Ojos de Monreal es un manantial situado cerca del municipio turolense de Monreal del Campo, a unos 2 km de la localidad. Se ubica en la conocida como “Fosa del Jiloca”, una amplia depresión de fondo plano que se prolonga desde Daroca hasta Teruel.
Los Ojos de Monreal constituye uno de los mayores humedales de la península ibérica, recibiendo sus aguas de vertientes y surgencias subterráneas. Se trata de un conjunto de manantiales, interconectados entre sí por diferentes canales, creando una estructura en forma de rosario. Unas oquedades circulares, de aproximadamente 3 m de profundidad, que constituyen el nacimiento natural del río Jiloca.
Este espacio natural desempeña diferentes funciones hídricas, indispensables para la vida y economía de las localidades cercanas, entre ellas el almacenamiento de agua o la mejora de la calidad de la misma.
Y aunque en la actualidad haya mermado considerablemente su tamaño, gracias a la degradación del terreno y a la desviación de los flujos hídricos, los Ojos de Monreal constituyen un microclima caracterizado por su gran biodiversidad de especies.
La vegetación existente en este paraje corresponde con la típica encontrada en zonas húmedas y encharcadas, con alto nivel freático, siendo la vegetación palustre, formada por carrizo (Phragmites australis) y eneas (Typha domingensis) la que domina el paisaje.
En cuanto a la vegetación arbórea, encontramos plantaciones de chopo (Populus sp.), que se entremezclan con chopo negro (Populus nigra), álamo cano (Populus × canescens), sauce blanco (Salix alba), así como una extensa huerta. También podemos observar especies arbustivas como zarzamora (Rubus ulmifolius), rosal silvestre (Rosa canina), majuelo (Crataegus monogyna) o saúco (Sambucus sp.).
En relación a la fauna, destaca la gran variedad de peces que habitan sus aguas como: el barbo (Barbus barbus), la trucha común (Salmo trutta), el gobio (Gobio gobio), la madrilla (Chondrostoma miegii) o el pez lobo (Barbatula barbatula).
Además de la gran diversidad de aves acuáticas que dominan el carrizal, como el azulón (Anas platyrhynchos), la polla de agua (Gallinula chloropus), el zampullín común (Tachybaptus ruficollis), el chochín (Troglodytes troglodytes) o el alción (lcedo atthis). Pudiendo avistarse también: carricero común (Acrocephalus scirpaceus), oropéndola (Oriolus oriolus), pito real (Picus viridis), mirlo real (Turdus merula), cuco común (Cuculus canorus), buitrón (Cisticola juncidis) o la lavandera blanca (Motacilla alba).
En definitiva, este manantial forma un interesante espacio natural, a nivel paisajístico, hídrico y medioambiental.