Red de Caminos
Naturales
Etapa 5: Orbaneja del Castillo - Valdelateja - Pesquera de Ebro
Descripción
Las Hoces del Alto Ebro y Rudrón
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¡AVISO IMPORTANTE!
LA PASARELA ENTRE LA CENTRAL HIDROELÉCTRICA EL PORVENIR Y LA ERMITA DE NUESTRA SEÑORA DE EBRO SE ENCUENTRA CORTADA AL TRÁNSITO
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El camino se inicia junto a los farallones del cañón del Ebro y los fuertes rocosos de El Castillo y el Arroyón, para entrar en un área de reproducción de aves protegidas, como el águila real. Se pasa luego por Escalada, donde los farallones de Aidal y Espeluca protegen un notable patrimonio artístico. Tras cruzar de orilla en la central hidroeléctrica de El Porvenir, la senda sortea cascadas y roquedos hasta la desembocadura del río Rudrón. El Ebro sigue discurriendo encañonado mientras el GR 99 culmina esta etapa en Pesquera de Ebro, donde las numerosas casas palaciegas y monumentos dan testimonio del esplendor histórico de la población durante las edades Media y Moderna.
Desde Orbaneja del Castillo (660 m) cruzado el puente del Ebro, el Camino Natural avanza por la margen derecha, entre el río y los farallones rocosos del cañón del Ebro, con encinas, quejigos y la vista de Orbaneja a la izquierda, por donde discurre la carretera. Tras rodear los fuertes rocosos de El Castillo y el Arroyón, el Ebro dibuja meandros a lo largo de un área de reproducción de especies protegidas: buitres, halcones peregrinos, águilas reales, etc.
Sobre un pronunciado meandro se tiende el puente (junto al que se encuentra la fuente de la Torre, de preciadas y medicinales aguas ferruginosas) por el que se accede a Escalada. El pueblo está protegido por los farallones de Aidal y Espeluca. Sobresalen su iglesia románica, del siglo XII, con bella portada de doce jambas y arquivoltas labradas; el palacio de los Gallo, del siglo XVII; y su entramado urbano montañés.
Desde el puente continúa la pista a la ermita de San Roque y Quintanilla-Escalada. Tras cruzar la N-623 en dirección Santander, arranca una pista que sigue el canal de la Fábrica en un área de protección animal. Así se llega a la ermita de Nuestra Señora de Ebro, donde el primer sábado de junio se celebra una popular romería. En 700 m se llega a la central hidroeléctrica de El Porvenir.
Unos 200 m antes de alcanzar la central, el camino atraviesa una pasarela y cruza a la orilla derecha. Entre quejigos, hayas, abedules y vegetación de ribera avanza la senda al suroeste, sorteando roquedos y cascadas hasta la desembocadura del Rudrón en el Ebro. Allí continúa hasta Valdelateja; alcanzando su iglesia, de posible origen románico y su caserío, modelo de conservación preñado de construcciones de piedra. En las cercanías se encuentra su balneario, una casa de baños del siglo XIX, hoy posada de turismo.
La salida se inicia por una senda entre carrascas hasta el camino de Cortiguera, que desciende por una ladera salpicada de encinas, desde donde se observa el curso encañonado del Ebro. A la derecha se extiende el barranco del monte El Crucero y se accede a Cortiguera, que hace recapacitar sobre el abandono rural al observar su ruina, especialmente un sólido palacio de sillería del siglo XVIII (en restauración), o su iglesia del siglo XVI, con fuerte torre y bóveda de crucería.
Se continúa por detrás de la iglesia entre un carrascal que baja al arroyo Turriente o de Molinillos, rodea el barranco y, tras una curva a la izquierda, continúa por un camino que desciende por la Incosturilla al arroyo de Cubillo, cerca de su desembocadura en el Ebro, dejando atrás un puente y dibujando la curva del meandro, bajo la V-5143, por la que sigue a Pesquera de Ebro, localidad a la que se accede por su puente medieval, guardado por la ermita barroca de San Antonio (645 m).
El primer documento de Pesquera data de 941, aunque estaría habitada en el siglo IX. Según indica su nombre, surgió como lugar de pesca y su estructura responde a un caserío semidisperso vertebrado alrededor de un camino principal. Su época más gloriosa fue entre el siglo XVII y XVIII, cuando sus habitantes eran en su mayoría hidalgos. Sus palacios y casonas blasonadas, con magnífica sillería y puertas con arcos, lo convierten en uno de los pueblos con mayor densidad de escudos nobiliarios de Burgos (uno de la calle de Abajo reza: “Jesús María. Esta es casa de placer y a la gente da alegría. Ave María. Año 1712”). Son notables las muestras de arquitectura popular montañesa, como las chimeneas, su iglesia de San Sebastián (de posible origen románico) y el crucero medieval.
Perfil
Destacados
Información adicional
Espacio Natural de las Hoces del Alto Ebro y Rudrón
Miles de años han empleado el caudaloso río Ebro y su afluente el Rudrón para abrir sus cursos en estas tierras burgalesas. Para ello, la feroz fuerza del agua ha desgastado la roca caliza y hoy se puede contemplar su impresionante resultado: hoces, gargantas y cañones que en algunos puntos alcanzan más de 200 m de profundidad. A su lado, contrastan los colores de hayas, encinas, robles, quejigos y exuberantes bosques de ribera.