Etapa 3: Embalse del Pontón Alto – Collado Hermoso

El viajero comienza descendiendo, con la presa como testigo impasible, hasta el río Eresma, aguas abajo del embalse. Al llegar al río, un pequeño tramo de senda conduce al puente de las Merinas que en el pasado ayudó a multitud de ovejas a superar el cauce y hoy en día hace lo propio con senderistas y cicloturistas. Tras el puente, el trazado zigzaguea en subida, alcanzando el punto kilométrico 42 y comparte itinerario con la Senda Verde del Alto Eresma, hasta el panel interpretativo de dicha ruta.

El Camino Natural continúa por camino ancho y encadena suaves subidas y bajadas, para llegar a un punto en que el que se debe cruzar la carretera SG-P-6121, siempre con mucha precaución. El trazado avanza entre praderas aprovechadas a diente por ganado vacuno principalmente. La sierra de Guadarrama acompaña al viajero a la derecha, y a su izquierda puede contemplar las vistas panorámicas de San Cristóbal de Segovia, Palazuelos de Eresma e incluso la monumental ciudad de Segovia.

Tras superar el punto kilométrico 46 se supera el arroyo de Torreiniesta, un afluente del mismo y posteriormente el arroyo de Peñas Lisas. Entre tanto, el viajero deja a la izquierda pequeños rodales de pino silvestre (Pinus sylvestris) y divisa tras ellos la localidad de Trescasas.

La actividad ganadera acompaña en todo momento al caminante, que en las cercanías del arroyo de Miguel Bueno alcanza el Rancho de la Marquesa que realizaba las funciones de encerradero al esquileo situado en la cercana Cabanillas del Monte.

Se continúa con tramos en los que se alterna el ascenso y el descenso para alcanzar el punto kilométrico 50, dejando a la izquierda del usuario la población de Torrecaballeros. En estas latitudes la primavera provoca una explosión de colorido y biodiversidad, con gran número de especies vegetales que transforman las laderas de la sierra de Guadarrama en verdaderas alfombras que despiertan los sentidos del caminante.

A la izquierda del itinerario, y coincidente con un cruce de caminos, se alcanza el Descansadero de Torrecaballeros que todavía a día de hoy se encuentra en uso. El trazado supera el punto kilométrico 52, y se vuelven a suceder tramos de subida y bajada al mismo tiempo que pequeños arroyos que descienden de la sierra cruzan el recorrido. En el paraje conocido como Peña del Gato, y después de cruzar un arroyo, se llega al punto kilométrico 53.

Un kilómetro después un camino de gran anchura cruza el itinerario y, más adelante, se llega a una cancela. A su derecha, un paso giratorio de peatones precede a la pasarela de madera que cruza del río Pirón, donde es frecuente encontrar vacas que se refrescan con sus aguas. En ligera subida se suceden los mojones de la vía pecuaria y tras el punto kilométrico 55 se alcanzan varios cruces de caminos, entre ellos sale uno a la izquierda del trazado que se dirige a la población de Santo Domingo de Pirón.

Se continúa el viaje y se deja a la derecha un descansadero de la Cañada Real, hoy en día poblado parcialmente por pinos silvestres. El camino sigue en dirección norte, y cruza la carretera N-110 tras superar a ambos lados de la misma sendos pasos canadienses y cancelas, que impiden que el ganado alcance la carretera por lo que deben quedar perfectamente cerradas.

Por camino de gran anchura y en suave descenso el itinerario avanza hacia el este, donde el arroyo de la Garganta aporta la humedad suficiente para que los fresnos (Fraxinus angustifolia) presenten un bello porte y saludable follaje. Al dejar atrás los terrenos cercanos al arroyo, el melojo (Quercus pyrenaica) se impone como la especie principal y después de un zigzagueo, se cruza el paso canadiense y el puente por encima del arroyo de Sotosalbos, para por fin entrar a esta localidad.

Ya por asfalto, se avanza por el camino Segovia, se gira a la derecha por la calle de las Eras para cruzar la carretera SG-V-2366 por el paso de cebra al efecto. Al otro lado de la carretera se continúa por el camino Segovia, se deja a la derecha las pistas polideportivas municipales, y se abandona después el núcleo urbano. Tras un paso canadiense el trazado vuelve a ser de tierra, y unos metros (y otro paso canadiense) después el trazado discurre paralelo a la carretera N-110.

El río Viejo se supera gracias a una pequeña pasarela de madera y poco después del punto kilométrico 61 se cruza de nuevo la carretera N-110, tomando todas las precauciones posibles, para adentrarse en la población de Collado Hermoso. Poco después de dejar la iglesia de San Nicolás de Bari a la derecha y un pequeño y bello parque a la izquierda, se alcanza el panel interpretativo que pone el punto final a esta tercera etapa del Camino Natural de la Cañada Real Soriana Occidental entre el Embalse del Pontón Alto y Collado Hermoso.