Red de Caminos
Naturales
Etapa 3: La Oliva - Tefía
Descripción
A los pies de la montaña Sagrada
La etapa se dirige hacia la emblemática y legendaria montaña de Tindaya, un lugar sagrado para los aborígenes de la isla cuya imagen acompaña al caminante durante buena parte del trayecto. Después de atravesar el pueblo de Tindaya, el camino natural alcanza la montaña Quemada y cruza las bellas llanuras del Tablero Blanco y el Tablero de las Avutardas para finalizar en la ermita de San Agustín de Tefía.
La etapa comienza en La Oliva, que asumió el poder administrativo y político durante el siglo XVIII después de la decadencia de Betancuria, capital histórica de la isla. El primer tramo de la etapa se dirige hacia el oeste, pasando por el Lomo de la Virgen, hasta la montaña de Tindaya, cuya imagen acompañará al viajero durante todo el recorrido hasta llegar al pueblo que le da nombre.
Partiendo de la iglesia de Nuestra Señora de la Candelaria de La Oliva, el sendero se dirigirá hacia la calle de La Orilla y, siguiendo las indicaciones del camino, se gira a la izquierda por la calle de Las Tuneras. Más tarde,se vuelve a cambiar de dirección, esta vez a la derecha por la calle del Capellán de la Rosa Blanca, hasta llegar a un espacio abierto en el que el camino sigue por pista de tierra en dirección oeste, donde se vislumbrará, ya a lo lejos, la montaña de Tindaya.
Se continúa por la pista de tierra que atraviesa la llanura, donde se dejará a la derecha la montaña de La Oliva. Después el caminante podrá disfrutar de una mesa informativa de la cadena montañosa que se divisa en el horizonte (Tindaya, La Muda, montaña Quemada).
Antes de llegar al pueblo de Tindaya, se deberá bordear por el oeste la montaña de Tindaya, a cuyos pies nace el sendero que sube hasta ella. Una vez en Tindaya, unos 50 m antes de llegar a la ermita de Nuestra Señora de la Caridad, situada junto a la carretera central. Acto seguido el camino gira a la derecha en un cruce en el que también se podrá optar por seguir recto, tomando el sendero PR FV 9 que se dirige a Vallebrón, y que vuelve a conectar posteriormente con el camino principal.
En las inmediaciones de Tindaya se podrán encontrar algún grupo de palmeras (Phoenix canariensis) y tarajales (Tamarix canariensis), así como plantaciones de pitas (Agave sp.) y tuneras (Opuntia spp.). La tunera es una especie introducida que se utilizaba para el cultivo de la cochinilla (Dactylopius coccus), un insecto parásito empleado para la elaboración de tintes. Más adelante, en montana Quemada, se podrá observar comunidades de tabaiba dulce (Euphorbia balsamifera) y salvaje (Euphorbia regis-jubae).
Las especies animales más representativas de este entorno son las aves, como la hubara o avutarda canaria (Chlamydotis undulata fuertaventurae), el alcaraván (Burhinus oedicnemus), el corredor (Cursorius cursoi) o la terrera marismeña (Calandrella rufescens). En esta etapa, el camino linda con varias ZEPAs (Zona de Especial Protección para Aves) destinadas a su conservación.
Siguiendo las indicaciones de las señales, se sale de Tindaya y continúa el camino hasta la montaña Quemada a través del Malpaís del Sobaco, formado con materiales originados a partir de una erupción.
En la montaña Quemada aparecerá un cruce que invitará a desviarse hasta la estatua erigida en 1980 en honor de Don Miguel de Unamuno, que estuvo desterrado en la isla en 1924. La blancura del monumento, pensado para ser visto desde la lejanía, resalta sobre la base de la montaña en la que se encuentra.
Pasado este punto, el camino gira hacia el sur, dejando atrás la montaña Quemada, y avanza por la Punta del Sobaco a través de la llanura de Tablero Blanco, hasta llegar al cruce con la carretera que se dirige a Tefía. El sendero sigue avanzando por el barranco del Risco y, una vez pasado el Rincón del Cercado, donde se puede observar tierras cultivadas, el caminante encontrará el punto donde el camino principal conecta de nuevo con el sendero de pequeño recorrido PR FV 9 Tindaya-Tefía, que viene del Paisaje Protegido de Vallebrón.
La ruta prosigue en su último tramo por el Tablero de Las Avutardas, otra llanura de singular belleza, que se deja al oeste girando hacia la izquierda, a la altura de un vivero, para continuar desde allí hasta la ermita de San Agustín de Tefía, donde finaliza la etapa. Frente a la ermita se encuentra el centro cultural de Tefía y varios paneles informativos de las etapas 3 (La Oliva-Tefía) y 4 (Tefía-Betancuria) del camino natural. En el pueblo de Tefía se puede contemplar el monumento emblemático, de la Molina de Tefía, cuyas características arquitectónicas la diferencian de los molinos, más antiguos.
Enlaces de interés
Puntos de interés
Cultura
- Iglesia Nuestra Señora de la Candelaria
- Plaza de la Iglesia Nuestra Señora de la Candelaria
- Ermita de San Agustín
Municipio
Orografía
Perfil
Destacados
Información adicional
La montaña de Tindaya
La montana de Tindaya, declarada Monumento Natural de la Red Canaria de Espacios Protegidos y Bien de Interés Cultural, se yergue solitaria sobre el Llano de Esquinzo, a pocos kilómetros del océano, en el noroeste de Fuerteventura. Originada a partir del Complejo Basal del Macizo de Betancuria, la montaña posee una altura (400,5 m) que le permite atrapar las gotas que dejan los vientos alisios cuando soplan bajo en los meses de verano, agua que es almacenada en las fisuras de las rocas y vertida a los pies de la montaña por tres pequeñas fuentes.
Tindaya es algo más que una montaña que destaca por la belleza de su perfil; es parte de los mitos de Fuerteventura desde los albores de su cultura. Esta montaña era sagrada para los aborígenes de la isla, los majos, que grabaron en las rocas que la coronan más de trescientas siluetas de pies humanos, denominados podomorfos. La importancia histórica y arqueológica de este lugar también se vio aumentada por el descubrimiento de varios enterramientos en túmulos.