Red de Caminos
Naturales
PR FV 15.1: Tefía - Valle de Tetir - Tetir
Descripción
Un sendero con vistas
El sendero de pequeño recorrido PR FV 15.1 comienza en la ermita de San Agustín de Tefía y sube a la Degollada de Facay para descender a través del valle de Tetir a La Solana. En este punto el sendero conecta con el PR FV 15 hasta el pueblo de Tetir, ofreciendo magníficas panorámicas del entorno por el que discurre.
El sendero PR FV 15.1 se inicia por el lado izquierdo de la ermita de San Agustín de Tefía, donde también comienza la etapa 4 de la ruta principal, y se adentra en un camino de tierra desde el que se tienen fabulosas vistas del pueblecito de Tefía y de su entorno.
Posteriormente, el sendero asciende suavemente hasta la Degollada de Facay, desde la cual se disfruta, mirando hacia el oeste, de una magnífica perspectiva de Tefía, en las faldas de la montaña de Facay; y del valle de Tetir, hacia el este. A partir de este punto, el sendero desciende suavemente atravesando el valle de Tetir, donde se observan las formas de cultivos tradicionales de la isla de Fuerteventura (gavias, nateros y cadenas), hasta llegar a una zona denominada La Solana. Aqui el sendero conecta con el PR FV 15 que viene de Casillas del Ángel, y con el que coincide hasta el pueblo de Tetir, donde finalizan ambos itinerarios.
Puntos de interés
Cultura
Informacion
Municipio
Orografía
Perfil
(calculado según criterios MIDE para un excursionista medio poco cargado)
Destacados
Información adicional
Los cultivos tradicionales
Fuerteventura ha tenido una fuerte tradición agraria que se ha especializo en distintas técnicas de cultivo para aprovechar al máximo las escasas lluvias que se descargan en la isla, haciendo aptos para el cultivo terrenos en los que antes hubiera sido imposible desarrollarlo. Dentro de estas técnicas, las más representativas son los nateros, las gavias y las cadenas. Los nateros consisten en cortar el cauce de un barranquillo mediante muros de piedra seca para retener el agua de lluvia y los sedimentos y nutrientes que arrastra. Estos sedimentos van estancándose, creando zonas de cultivo fértiles. Una vez formada la terraza con la tierra retenida, se procede a su acondicionamiento para la práctica de la agricultura.
Las gavias son parcelas de tierra que suelen estar escalonadas y delimitadas por muros de tierra (trastones) hacia las que se canaliza el agua de lluvia, que las inunda una a una. Las gavias, al contrario que los nateros y cadenas, pueden estar en zonas más llanas, ya que el agua de lluvia les llega canalizada. Una vez que las parcelas están llenas, el agua es filtrada por la tierra, que la dota de las cualidades óptimas para el cultivo.
Las cadenas son una variante de los nateros y, a diferencia de estos, se encuentran a mitad de las laderas de las montañas, por lo que sus dimensiones difieren. Son construcciones de muros de piedra seca que retienen los sedimentos arrastrados por la erosión del agua que, con el paso de los años, van creando las zonas de cultivo. Al no tener la profundidad de un barranquillo en el que se produce un natero, no pueden tener el mismo volumen de carga. Este tipo de estructuras juegan un papel importantísimo en la lucha contra la desertización de la isla, ya que retienen el suelo perdido por el arrastre del agua, muchas veces en el mar.