Red de Caminos
Naturales
Etapa 8: Villa de Mazo - Santa Cruz de La Palma
Descripción
Cerrando el recorrido circular por las medianías del este insular
La etapa final del recorrido circular por La Palma discurre por una de las zonas más urbanizadas de la isla. Aunque en algunos tramos el asfalto da paso al empedrado original del Camino Real, la ruta se mantiene cerca de zonas habitadas, ya sea en barrios dispersos o en centros urbanos como San Pedro (Breña Alta) o Santa Cruz de la Palma. A pesar de la proximidad a la vida urbana, aún se pueden apreciar elementos del entorno rural tradicional palmero. Al caminar, es común encontrarse con pequeñas explotaciones agrícolas y numerosas cruces y cruceros en los márgenes del camino. Estos últimos son los protagonistas de una de las celebraciones más queridas de esta zona, la Fiesta de las Cruces, que se celebra el 3 de mayo. Durante esta festividad, las cruces se decoran con telas y flores y las mejores joyas de cada hogar, ofreciendo un espectáculo de color y tradición.
Para la última etapa del GR130 se parte del área recreativa Montaña de la Tosca, situada bajo un frondoso pinar de repoblación (Pinus halepensis y Pinus radiata) en la ladera de la colina que le da nombre. Desde la cima de esta montaña, hay un mirador astronómico al que se puede acceder desde un desvío a unos 500 m al sur del área recreativa.
La ruta continúa por la pista asfaltada por la que se recorrió el último kilómetro de la etapa anterior. Avanza hacia el norte, pasando junto a algunas casas solitarias del barrio de El Pueblo, en Villa de Mazo, con vistas al océano hacia el este. Poco después, se llega a un cruce con la carretera que baja hacia el casco urbano, aunque se ha de continuar de frente, en dirección al pequeño pago del Poleal, pasando por junto a una hornacina con una cruz.
Después de otro medio kilómetro, se abandona el asfalto para continuar por un camino empedrado, recuerdo del antiguo Camino Real. Este sendero se adentra en una zona más salvaje, rodeada de helechos, cardos y demás matorral termófilo. A lo largo del camino, es posible encontrar mocanes (Visnea mocanera) o cedros canarios (Juniperus cedrus), frutales escapados de los huertos cercanos o las particulares inflorescencias del cuello de cisne (Agave attenuata).
El camino vuelve al asfalto junto a la Casa del Cura, una de las edificaciones más antiguas del municipio. Esta vivienda servía como hogar para el cura que regentaba la ermita de San Jacinto y también contaba con otro edificio que se utilizaba de almacén y casa de acogida para la pernocta de los viajeros que hacían uso del Camino Real.
A partir de este punto ya es perfectamente visible uno de los hitos más importantes de la etapa, la montaña de la Breña, a la que se llega después de recorrer otro kilómetro. En el trayecto, merece la pena detenerse en el área recreativa junto a la cruz del Monte, donde se disfrutan unas bonitas vistas de la ladera de la montaña. Primero se observan las casas dispersas de Villa de Mazo, a continuación, las plataneras y finalmente, pegado al océano, el aeropuerto de La Palma. Al pie de la montaña se ubica una zona recreativa que cuenta con aparcamiento y un centro de información.
La montaña de La Breña se alza como un verdadero oasis de vegetación entre las zonas más urbanizadas de los alrededores. Sus laderas están cubiertas por un exuberante monteverde en el que se mezclan especies propias de la laurisilva como brezos (Erica arborea), fayas (Myrica faya) o acebiños (Ilex canariensis), con otras más típicas del bosque termófilo como acebuches (Olea cerasiformis), sabinas (Juniperus turbinata ssp. canariensis), mocanes (Visnea mocanera) o palmeras (Phoenix canariensis).
Aunque el camino se desvía de la carretera para tomar un sendero que desciende entre la montaña y las casas del barrio de las Ledas, en Breña Baja, existe la opción de seguir por la carretera hasta la cima, donde un mirador ofrece unas excelentes vistas del entorno. El descenso culmina al llegar a una carretera junto a una balsa de riego. Desde allí, se cruza la carretera para salvar una pequeña loma con la compañía de un canal de riego de hormigón.
El recorrido continúa por la carretera, atravesando el barranco de Amargavino, donde se toma una pista de hormigón que prosigue en dirección norte y pronto se convierte en una carretera asfaltada. A medida que avanzas entre campos y casas rurales, pasando junto a varias cruces, como la cruz de Miranda o la del Rosal, situada junto a la sencilla ermita de San Miguel Arcángel, el camino cruza la carretera en varias ocasiones hasta alcanzar el barranco de Loja del Llanito. Después de vadearlo se asciende por un camino empedrado hasta llegar al casco urbano de San Pedro, capital de Breña Alta.
Después de cruzar la carretera LP-204, la ruta continúa por las calles de San Pedro, pasando junto a la iglesia de San Pedro y el ayuntamiento. A partir de aquí, el itinerario prosigue en paralelo a la carretera durante casi 2 km hasta que la calle que se venía utilizando sube para encontrarse con la carretera en el barrio de Buenavista. Durante el siguiente kilómetro, el camino transcurre junto a la carretera, casi siempre por acera, aunque en algunos tramos se debe caminar por el arcén, por lo que es importante tener precaución, especialmente al cruzar por las rotondas. Durante este recorrido, es aconsejable desviarse temporalmente del camino para acercarse a la ermita de Nuestra Señora de la Concepción y a un espectacular mirador, situados ambos sobre el Risco de la Concepción, un edificio volcánico de origen submarino con forma de medialuna declarado Monumento Natural en 1987.
De regreso a la ruta principal, se abandona la carreta LP-202 para descender por una de las calles del barrio de La Cuesta, que está encaramado a la cima del Risco de la Concepción. Enseguida se pasa junto a una plazuela donde está la particular cruz de los Bolos y, poco después, por la puerta del Maroparque Isla de La Palma, un parque zoobotánico que sirve como centro de rescate de animales exóticos. El descenso va atajando las revueltas de la carretera y, al hacerse rodeado de edificios durante toda la bajada, apenas se nota que se ha pasado del municipio de Breña Alta al de Santa Cruz de La Palma.
Para concluir la etapa tan solo queda terminar de descender por la calle San Sebastián, ya en pleno casco urbano de Santa Cruz. En este tramo se pasa junto a la ermita del mismo nombre, antes de llegar a las escalaras de bajada a la Plaza de España, no sin antes pasar junto al edificio de la Real Sociedad Cosmológica, que también alberga la biblioteca municipal. En la plaza de España de Santa Cruz de la Palma, a los pies de la iglesia Matriz de El Salvador y frente al Ayuntamiento, concluye esta aventura de cerca de 150 km kilómetros rodeando la Isla Bonita.
Perfil
(calculado según criterios MIDE para un excursionista medio poco cargado)
Destacados
Información adicional
Risco de La Concepcióna
El Risco de La Concepción, situado en el municipio de Breña Alta, en la isla de La Palma, es un Monumento Natural protegido por la Ley 12/1994, de 19 de diciembre. Forma parte de la Red Canaria de Espacios Naturales Protegidos (ENP) y está integrado en la Red Natura 2000, como Zona de Especial Conservación (ZEC).
Este imponente risco, con una caída de más de 300 m, marca el límite sur de la ciudad de Santa Cruz de La Palma. Su formación se debe a un proceso hidrovolcánico freatomagmático y a una erupción relativamente reciente, lo que le otorga un gran valor geológico. Originado en aguas poco profundas, antes de que existiera la Cumbre Nueva, el Risco de La Concepción tiene una forma distintiva de media luna. Su flanco oriental ha sido esculpido por una intensa erosión marina, resultando en un impresionante acantilado costero.
El Risco de La Concepción, con su distintiva estructura volcánica y sus tonos amarillentos, es un verdadero tesoro para quienes se interesan por la ciencia, la geología y la geomorfología. Situado en un entorno bioclimático semiárido, el risco es un refugio de vegetación típica del bosque termófilo, donde el cardonal-tabaibal domina a menor altitud. En las zonas más húmedas y con rezumaderos se encuentran ejemplares del monteverde. Por ello, el Risco es un lugar ideal para la observación de flora y fauna, excursiones, investigaciones o tomar fotografías.
En su cima, a 400 m sobre el nivel del mar, se encuentra la Ermita de Nuestra Señora de La Concepción, construida en los inicios del siglo XVI y reedificada en 1672. La ermita alberga pinturas de entre los siglos XVII y XVIII y cuenta con un mirador, que ofrece vistas panorámicas de Santa Cruz de La Palma.
Montaña de La Breña
La Montaña de a Breña es lo que se conoce como cínder: un cono formado por acumulación de materiales volcánicos de pequeño tamaño como lapilli y escoria basáltica.
El especial interés de este espacio se debe a la presencia del hábitat de interés comunitario “Bosques de laureles macaronésicos (Laurus, Ocotea)”, lo que hizo que la montaña fuera declarada Zona Especial de Conservación de la Red Natura 2000.
La principal formación leñosa se corresponde con una laurisilva en transición con bosque termófilo, entremezclándose especies propias del monteverde como brezos (Erica arborea), fayas (Myrica faya) o acebiños (Ilex canariensis); con otras típicas del bosque termófilo como acebuches (Olea cerasiformis), sabinas (Juniperus turbinata ssp. canariensis), mocanes (Visnea mocanera), peralillos (Maytenus canariensis), granadillos (Hypericum canariensis) y palmeras (Phoenix canariensis).
En los tramos de sustitución hacia las zonas más antropizadas, dominan las comunidades nitrófilas de inciensales y vinagreras con especies como la magarza (Argyranthemum frutescens subsp. frutescens), la magarza de monte (Argyranthemum broussonetii), el incienso canario (Artemisia thuscula), el jediondo (Bosea yervamora), el duraznillo (Ceballosia fruticosa), el cabezón (Cheirolophus canariensis var. canariensis), la corona de la reina (Gonospermum fruticosum), el mato risco (Lavandula canariensis), la malva de risco (Lavatera acerifolia), la vinagrera (Rumex lunaria) o la salvia canaria (Salvia canariensis) entre otras.
Completan las formaciones vegetales de la montaña los herbazales subnitrófilos de cardo de medianías y helechales y una zona de repoblación de pino canario (Pinus canariensis).
Aparte de sus valores florísticos, la montaña de La Breña supone también un refugio para una interesante población de coleópteros entre los que se encuentra una especie descrita por primera vez en este enclave, Curimopsis dacilae.