Red de Caminos
Naturales
Etapa 13: Cala en Turqueta - Cala Galdana
Descripción
De cala en cala entre pinares y barrancos.
Durante esta etapa, el Camí de Cavalls continúa recorriendo la costa sur menorquina, circulando a través del mosaico que componen los barrancos en los que se ubican algunas de las calas más famosas de la isla. La etapa transita por la contraposición de ambientes secos de las zonas elevadas y de ambientes más húmedos en el interior de los barrancos, durante los 6,5 kilómetros que separan, entre ascenso y descenso, Cala en Turqueta de Cala Galdana.
La costa sur de Menorca se compone de materiales carbonatados cuyo origen se remonta a hace 20 millones de años, cuando se formaron los depósitos orgánicos marinos que, posteriormente emergieron a la superficie. Es por ello que, esta etapa transcurre sobre la enorme plataforma calcárea que compone el sector sur de la isla y por los barrancos que cortan verticalmente la misma y van aumentando en profundidad y anchura de norte a sur.
Cerca del acceso al parking y frente a una zona de descanso se ubica un panel informativo desde el que parte un sendero pedregoso y entremezclado con arena y raíces. Este camino rodea Cala en Turqueta y va ascendiendo, entre encinas (Quercus ilex) y pinos blancos (Pinus halepensis), para salir del barranco en el que está encajonada la cala.
A pocos metros del inicio, el camino gira suavemente hacia la izquierda para seguir ascendiendo en dirección este. Durante algo más de un kilómetro el sendero se aleja de la línea costera, ascendiendo hasta los 55 metros por un tramo pedregoso y enraizado con algunos puntos arenosos.
Aquí se aprecia la primera variación de vegetación, pues esta se encuentra más dispersa, como caracteriza a los ambientes secos. Se observan a lo largo del recorrido arbustos de porte bajo y espinosos, los conocidos Socarrells. Además, los alrededores están salpicados de ejemplares de romero (Rosmarinus officinalis), jara (Cistus sp.), tomillo (Thymus mastichina) y brezo (Erica sp.), entre los que es posible percibir, si se presta atención, roedores, reptiles y aves marinas o rapaces, como el águila pescadora (Pandion haliaetus). Los ojos más expertos también podrán distinguir formaciones arbóreas formadas por aladiernos menorquines (Phillyrea media var. Rodriguezii), encinas y pinos.
Pasado el primer kilómetro y medio, la ruta cambia de sentido hacia el sur, comenzando en dirección sureste el descenso del barranco en el que se encuentra el desvío hacia Cala Macarelleta. En la parte más profunda del barranco, entre las imponentes paredes calizas, el sendero es principalmente arenoso, a excepción de algunos puntos donde sobresalen rocas de manera heterogénea. En este sector, se aprecia un ambiente más fresco y sombrío donde la vegetación se espesa, apareciendo ejemplares característicos de zonas más húmedas como las higueras (Ficus carica).
En este punto, en el fondo del barranco, el recorrido vuelve a cambiar de sentido. Esta vez en dirección noroeste, comenzando un nuevo ascenso para superar el barranco de Cala Macarelleta, donde a pocos metros el Camí de Cavalls pasa un pequeño cañón, encuadrado entre las imponentes paredes de roca caliza y la frondosa vegetación. Superado el desfiladero, el desigual sendero sigue ascendiendo por unas escaleras esculpidas en la roca hasta incorporarse en una pista forestal, algo más homogénea y llana, por la que transita unos metros antes de comenzar el descenso hacia Cala Macarella.
La bajada hasta cala Macarella por el lateral occidental del barranco calizo en el que se encajona, supone un descenso desde 48 metros sobre el nivel del mar hasta llegar a los 2 metros de la línea de costa. Se trata de un recorrido abrupto, heterogéneo y enraizado de no más de 400 metros de longitud y con una pendiente que puede superar el 20 % en algunos puntos.
Una vez cruzada Cala Macarella, la etapa se enfrenta al ascenso del lateral oriental del barranco de Santa Ana, en el que se encaja la playa, muy similar al descenso por la pared occidental. De nuevo, se trata de un tramo corto, de apenas 600 metros de longitud, que sube hasta situarse aproximadamente 58 metros sobre el nivel del mar. El recorrido obliga al senderista a agudizar los sentidos ya que se realiza por un sendero irregular, escarpado y enraizado cuya pendiente puede llegar a alcanzar y sobrepasar en algunas zonas el 20%.
Cabe recordar que Cala Macarrella es una de las playas más visitados por los turistas que llegan a Menorca y que gran cantidad de ellos acceden a la misma a pie desde la próxima Cala Galdana. Por este motivo, y para hacer más fácil el acceso a la misma, el Ayuntamiento de Ciutadella ha instalado unas escaleras de madera junto al sendero de Camí de Cavalls que, sin duda, harán más llevadero este impresionante recorrido.
Una vez acometido el ascenso, la etapa recorre algo más de dos kilómetros sobre la plataforma calcárea por un sendero que desciende de forma gradual hasta alcanzar Cala Galdana. Este tramo suele estar bastante concurrido a pesar de presentar características similares a los anteriores, pues atraviesa un área boscosa de pinos, encinas y acebuches, en la que las raíces y las rocas afloran sobre la superficie del terreno, siendo este bastante desigual y haciendo complicado el avance de los senderistas menos expertos. De cualquier forma, el esfuerzo realizado lleva aparejada una recompensa en forma de mirador sobre Cala Galdana cuando la etapa va aproximándose a su punto final. El acceso a este pequeño arenal es sencillo, ya que se encuentra acondicionado para bajar por escaleras o rampa y en él se ubican varias señales y un panel que informan sobre las instalaciones y trazado de los últimos metros de la etapa por la urbanización.
Ya en Cala Galdana la etapa discurre paralela al Pasaje del Río hasta cruzar el primer puente en dirección al paseo marítimo. Aquí recorre unos metros antes de girar a la izquierda para ascender por uno de los barrancos hasta la parte alta de la urbanización. El último tramo del ascenso se realiza por unas escaleras cobijadas por pinos que van a parar a la Avenida de Sa Punta, por la que la etapa continúa unos 300 metros antes de volver a girar a la izquierda en el carrier Camí de Cavalls donde se halla el término de la etapa.
Enlaces de interés
Perfil
(calculado según criterios MIDE para un excursionista medio poco cargado)
Destacados
Cala Macarella y Cala Macarelleta
Cala Macarella y Cala Macarelleta se localizan en la zona sur de Menorca, en el término municipal de Ciutadella de Menorca. Se trata de dos de las playas más populares de esta parte de la isla, dada la peculiaridad del entorno que las rodea.
Ambas playas son vírgenes, y en ambas destaca el color turquesa de sus aguas y la poca profundidad de las mismas. El mar se adentra tierra a dentro por la abertura que la erosión del mar y del torrente de agua dulce del barranco de Santa Ana han ido generando durante millones de años. Las dos playas se encuentran encajadas entre paredes blanquecinas de roca caliza; tupidas por pinares y en las que se encuentran antiguas cavidades.
A pesar de que comparten algunas características, Cala Macarella presenta un mayor tamaño y cuenta con un pequeño arenal asociado a la zona húmeda de la desembocadura y a los restos de Posidonia Oceanica, que evitan que la arena sea desplazada. Por su parte, Cala Macarelleta está considera como la “hija o hermana” de Cala Macarella. Se encuentra a un kilómetro al Oeste de esta y se puede acceder a ella siguiendo el Camí de Cavalls o por un sendero que rodea el acantilado que las separa. Es de dimensiones reducidas y su origen también se debe a la apertura del barranco de Santa Ana.
Cala Galdana
Cala Galdana fue durante años una de las calas vírgenes más populares de la isla. Destaca por su mayor longitud, que sin duda favoreció el desarrollo urbanístico de la zona que ha dado lugar a la actual urbanización que se asienta en ese punto. De uso principalmente turístico, esta colonia cuenta con múltiples servicios.
Se localiza entre los acantilados calizos de la desembocadura del barranco de Algendar, uno de los más importantes de la isla ya que cuenta con régimen de agua permanente y que está canalizado para su uso como puerto de pequeñas embarcaciones. La playa, muy similar al resto de calas situadas en la zona sur de la isla: el agua de mar penetra en la desembocadura rodeada de pinos, cuanta con una profundidad escasa y apenas se registran olas en momentos de temporal. Todo esto la convierte en un destino muy deseado para las familias con niños pequeños.